Y luego hay otra pata de 'inputs', que vienen a ser las conversaciones más o menos formales con asociaciones o grupos del entorno. Por ejemplo, direcciones de colegios próximos, AMPA/AFAs, asociaciones vecinales, y comercios varios. Sus sugerencias y demandas políticas se recogen también, como debe ser, y se escucha a la gente porque es que es para lo que estamos aquí.
Los coles nos han pedido dos aspectos críticos:
1. Que diseñemos calles en los que la doble fila no sea viable.
2. Que hagamos lo que haga falta para reducir la velocidad y, si es posible, directamente para cortar el tráfico. Esto último lo vamos a hacer en uno de estos dos centros, con el visto bueno de todas las familias con las que hemos hablado, que han sido docenas si no algún ciento.
También escuchamos a grupos de jóvenes, por ejemplo, como Fridays for Future, que es verdad que en Parla (aún) no tienen una movilización elevada pero están empezando a asomar la cabeza y demandar una ciudad acorde al siglo XXI. Y aunque aún no nos ha dado tiempo (LOL escribo esto horas después de en teoría salir de trabajar, y lo considero un descanso mental con el movidote que tengo luego) habría sido muy bonito preguntar a los grupos de la Casa de la Juventud, que los tenemos aquí mismo. Pero es que no nos da.
Hemos hablado con comercios locales, por descontado. Y aquí tenemos opiniones encontradas, pero esta nos la esperábamos. El comercio local ve con (generalmente) muy malos ojos estas intervenciones... hasta que pasan unos meses de su tendido, momento en el que empieza a cambiar de opinión. Hay uno que sabemos que NO va a ver esto con buenos ojos: el estanco. El estanco es uno de los puntos negros de la calle, y no solo porque dispense droga que provoca enfermedades, sino porque más de la mitad del estacionamiento ilegal lo causan sus clientes, que abandonan "un momentito" el coche en mitad de la calle. Y eso ahora se ha acabado.