A mí lo bueno de las playas nudistas es que ayuda mucho contra la dismorfia corporal.
Te das cuenta que hay cuerpos de todos los tamaños, colores y formas. Pero su belleza no es importante, sino que puedan cumplir sus funciones de estar vivo, relacionarte con la gente y el contexto.
Porque fuera de eso, solo salen cuerpos normativos, mostrados desde una mirada masculina y claramente sexualizados.