Veo tanta gente como tú en el trabajo, que entienden cual es el problema, lo tienen claro y lucharían.
Saben que en un grupo de 10 hay otra persona que está en la misma línea, y otra que tiene intuiciones pero no se atreve. Hay dos flipaos a favor, y el resto no dice nada.
La idea es no dar la obediencia por garantizada.