Habitualmente los servidores caseros no utilizan refrigeración líquida. Su problemática sería el consumo de energía, el agua utilizada durante el proceso de construcción de los componentes, o los minerales para su construcción.
Pero precisamente al ser caseros y tener el control, la gente suele ser mucho más consciente del gasto, borrando datos innecesarios, estableciendo límites.
Lo casero obliga a trabajar dentro de los límites. Y las empresas juegan a trabajar como si no existieran los límites planetarios.
Por eso sí aconsejamos que la gente intente mantener sus propios servidores caseros.