El asesinato de Ángel Berrueta fue un suceso ocurrido el 13 de marzo de 2004, cuando Ángel Berrueta Legaz, un tendero de 61 años del barrio de San Juan/Donibane de Pamplona, fue asesinado a tiros por el policía nacional Valeriano de la Peña y su hijo. Momentos antes, María Pilar Rubio, esposa y madre de los asesinos, discutió con Berrueta porque ella quería poner un cartel en la panadería regentada por el tendero donde exponía que los atentados del 11-M fueron obra de la banda terrorista ETA. Dos días antes, en Madrid, tuvieron lugar unos graves atentados y el gobierno español mantuvo durante varios días que la organización armada vasca fue la autora de los hechos. Los asesinos de Ángel Berrueta fueron condenados a prisión. Aunque la sentencia judicial reconoció la motivación política del asesinato, Berrueta no fue reconocido por el gobierno y las instituciones políticas como víctima política de este atentado.
Kontxi Sanchiz, una mujer de 58 años, murió de un ataque al corazón al día siguiente tras una carga policial en una manifestación convocada en Hernani el 14 de marzo de 2004 en protesta del asesinato de Berrueta. La muerte también provocó un debate político…