Es fascinante que todo el mundo de mi entorno familiar piense que me apellido distinto. Porque al ser de abuela materna, pues no lo tengo.
Ayer mi tío me contaba que le hablaron de mí, y estaba convencido que no podía ser yo porque pensaba que me apellidaba de otra manera.
Con comentar que mi primer sueldo no me llegó porque desde el ayuntamiento me pusieron el otro apellido.